PLC Cable de recarga para vehículo eléctrico VE 3P-32 T2 A T2 8M

260,00 

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Características destacadas del cable PLC para recarga de coches eléctricos

El PLC Cable de recarga para vehículo eléctrico VE 3P-32 T2 A T2 8M es una herramienta esencial para quienes buscan cargar su coche eléctrico de forma eficiente y segura. Este cable de alto rendimiento, desarrollado por la marca Policharger, brinda una corriente de carga trifásica de 32 A, lo que permite una carga rápida en una amplia gama de modelos de vehículos eléctricos. Su longitud de 8 metros otorga la flexibilidad necesaria para llegar a distintos puntos de carga con facilidad.

Cómo utilizar y sacar el máximo provecho del cable PLC de recarga eléctrica

El cable de recarga eléctrica PLC VE 3P-32 T2 A T2 8M ha sido diseñado específicamente para coches eléctricos que requieren una conexión AC trifásica, lo que garantiza compatibilidad con una variedad de modelos de vehículos. Para usarlo, simplemente conecta el extremo T2 de la infraestructura al punto de carga y el extremo T2 del vehículo a tu coche eléctrico, logrando así una conexión estable y segura. Gracias a los 8 metros de longitud, tendrás mayor libertad para estacionar tu vehículo en áreas públicas o privadas que cuenten con puntos de carga.

En resumen, el PLC Cable de recarga para vehículo eléctrico VE 3P-32 T2 A T2 8M es un accesorio fundamental para cargar eficientemente y con seguridad tu coche eléctrico. Siguiendo las pautas de cuidado y mantenimiento adecuadas, podrás disfrutar de un funcionamiento duradero y de máxima calidad.

Accesorios
Marca

Policharger

Tipo de corriente

AC trifásica

Intensidad nominal de corriente

32 A

Longuitud de cable

8 m

Infraestructura lateral

T2

Lateral del vehículo

T2

Mantenimiento y cuidados del cable PLC de recarga para vehículos eléctricos

Para asegurar un rendimiento óptimo y prolongar la vida útil del PLC Cable de recarga para vehículo eléctrico VE 3P-32 T2 A T2 8M, sigue estas pautas de cuidado:

Almacenamiento correcto:

Evita enrollar el cable demasiado apretado y protégelo de condiciones extremas, como temperaturas elevadas, humedad o exposición directa al sol. Cuando no lo uses, guarda el cable en un lugar fresco y seco.

Limpieza adecuada:

Limpia el cable con un paño suave y húmedo, sin utilizar productos químicos agresivos que puedan afectar la calidad de los materiales.

Revisión periódica:

Examina de manera regular el estado del cable y sus conexiones en busca de señales de desgaste o daño. Si encuentras alguna irregularidad, contacta al fabricante o un distribuidor autorizado para obtener asesoría o, si es necesario, realizar la reparación o sustitución del producto.

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